El No. 1 del mundo, Roger Federer, logró su primer título del año en el modesto torneo de Estoril (Portugal) al derrotar al No. 4 Nicolay Davydenko, por parciales de 7-6 y 1-2 y retiro del ruso. Para el suizo este triunfo significa ganar confianza para la temporada de arcilla que empieza este lunes con el Torneo Master Series de Montecarlo (defiende la final que el año pasado perdió con su némesis Rafael Nadal), luego vendrá Roma, Hamburgo (defiende el título) y finalmente el torneo, que para mí es el más importante en la mente de Federer, Roland Garros. Para lo cual también contrató al técnico José Higueras, quien ha llevado a conseguir este título a tenistas de la talla de Jim Courier y Michael Chang.
Para hablar un poco de la final, esta se desarrolló de forma muy irregular, debido a las condiciones climáticas. Hubo mucho viento durante el encuentro, lo que desfavoreció que el juego fuera realmente de buen nivel. El suizo ganó, sí, pero no convence su juego sobre esta superficie. Será difícil que logre su meta este año... ganar Roland Garros.
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